miércoles, 18 de septiembre de 2002
Enrique Prosen: "Mega se agotó el primer año"
Setiembre de 2002 - Quique Prosen, gerente de CIE Rock & Pop habla de todo.
No suele dar reportajes Enrique Prosen y debe ser porque es un hombre muy ocupado. No es para menos, está a cargo de la dirección artística y operativa de las FM Aspen, Rock & Pop (R & P) y La Metro, y de las AM Del Plata y América.
-¿Cómo se manejan seis radios?
-No tienen targets muy diferentes. La más impuesta es Rock & Pop, que está por cumplir 18 años en el mercado y apareció porque Daniel Grimbank quería una radio en la que sonaran los Rolling Stones, John Lennon y los Ramones. Por eso, cuando asumí la conducción de las demás, la idea era no joderla. Pero a su vez, había que cuidarle las espaldas.
-¿Cómo?
-Evitando que apareciera otra radio en el segmento en el segmento pop que la R & P había dejado de lado, porque a los que la hacemos nos gusta más el rock and roll. En su momento el rock creció y el pop perdió protagonismo a nivel mundial. Además, surgieron otras propuestas pop. La diferencia la dan los contenidos, las voces. Puede haber fórmulas como los Top 40, Luis Miguel o la canción anglo del momento. Son así, en contenidos no tenemos competencia. Entonces armamos La Metro, que apunta a los contenidos por la mañana y la tarde, y a la noche, a la música electrónica. Porque la única competencia que teníamos ahí era la Energy pero sabíamos que se caía a pedazos.
-Se logró con Metro lo que no se pudo con Sónica hace unos años.
-Porque aquel fue un proyecto mal encarado. Pero esa es la estrategia. Si tengo una cadena de supermercados no voy a abrir uno al lado del que más factura. Por eso siempre pensamos: "¿Cómo afecta este nuevo emprendimiento a R & P?" Tal vez una radio latina no toca en lo artístico pero sí en lo comercial. No hacemos estudios ni nada parecido, nos manejamos por instinto.
-¿Por qué falló Sónica?
-Tenía mal sonido y lo que buscábamos era comprar la frecuencia. Se logró y nos encontramos con Splendid que estaba Mauro Viale a la mañana y a la noche había unos umbanda que hasta mataban gallinas. El 11 de noviembre 1996, de un día para otro, nos echaron a patadas de la 106.3, nos mudamos, y terminó siendo una bendición en lo comercial (no compartíamos) y en la audiencia.
-¿Por qué terminó todo tan mal con la gente del 106.3 (Radiodifusora de Bs As)?
-Nos queríamos ir bien. Cuando arrancamos teníamos el slogan "Rock and Pop en la extrema derecha". Entonces ese año anunciamos "Nos hartamos de la la extrema derecha", sin hablar del dial. Eso les cayo mal y al otro día había un escribano en la puerta y no lo dejaban entrar a Pergolini a hacer su programa. Al final entró pero terminó todo mal. Resultado: hubo que poner en condiciones la 95.9, en vez de en 50 días, en 5.
-¿Cómo era la relación comercial?
-Los socios éramos Grinbank, yo y otros dos. Pusimos una guita y después se pagó sola. Al final de esa historia vinieron los mexicanos del CIE y compraron. Nosotros amortizamos la inversión en dos años, los mexicanos, después de la devaluación no la recuperan más.
-¿Cómo está Aspen sin Millenium enfrente?
-No creció, aunque algún anunciante se arrimó. En su segmento están Mega, más popular y Gen, que es intermedia. Aspen apunta al nivel socioeconómico más alto.
-¿Qué te parece La Mega?
-Estuvo bien armada. Pero la fórmula se agotó el primer año. Lo digo como oyente. Mi mujer la escuchaba y a los tres meses estaba harta de que le programen "Puerto Pollensa" ocho veces por día. En Aspen nos cuidamos de eso. Porque si te pongo un tema de Supertramp te hace acordar de un verano, una novia o una edad. Pero tres veces en un día te hincha las pelotas.
-Mega sigue primera.
-Según Ibope sí, según la calle no. Cuando salió no había lugar donde entraras que no se escuchara. Hoy eso no pasa. No descreo de Ibope pero una empresa que hace mediciones y cada tres meses cambia la metodología...
-¿Qué se escucha en la calle?
-No hay superioridad de una FM, salvo a la mañana que todos escuchan a Mario. Sí se escucha La Diez en todos lados.
-Los targets económicos son similares en tus radios ¿y la ideología?
-No estamos casados con nadie. Jamás bajamos línea.
-¿Los políticos ofrecen dinero?
-Todo el tiempo. Te ponen una pauta y te preguntan qué apoyo les podés dar. Nada, les daré el mismo que a Quilmes o Coca Cola de acuerdo a lo que inviertan. Se los trata como a una marca.
-Pero con una bebida no quedás "pegado".
-De acuerdo. Nunca voy a lograr que Mario hable bien de Rodriguez Saa, por ejemplo. Sí se puede negociar un reportaje como se hace con Divididos cuando saca un disco y la compañía pauta en la radio. Acá no se condiciona a nadie ni se les impone nada. Te digo más, si llegara a poner muchísima plata podrás lograr que nadie hable mal. Porque los clientes hay que cuidarlos porque te dan de morfar. Pero ni en pedo le voy a pedir a un conductor mío que hable bien de un anunciante.
-¿Tienen coproducciones?
-Dos: Ari Paluch en la Metro y Julio Lagos en Aspen. El resto son empleados.
-¿Quién tiene el cachet más alto?
-Mario, sin dudas. No digo cifras porque no corresponde.
-¿No es más socio?
-Es empleado de la radio y tiene contrato por un año más, como la mayoría de las figuras de nuestras radios. Mario fue socio cuando, en la hiper de Alfonsín, Grinbank se hartó y no puso más plata. El 11 de setiembre del 89 hubo que levantar todos los programas y Mario se quedó, casi gratis, a poner el hombro. Vino Menem, la cosa mejoró para marzo y rearmamos la programación. Grimbank, en agradecimiento porque la mantuvimos a flote gratis, nos dio el 33 por ciento. De ahí le dimos el 8 por ciento a Mario y a Bobby Flores. Cuando vendimos, se llevaron su parte de la guita.
-¿Cómo quedó la relación con Grinbank?
-En lo personal, excelente. Sigue siendo mi amigo. A nivel laburo, con el grupo hubo acusaciones cruzadas. Daniel les tiró mierda a los mexicanos pero no se pudo probar nada y hoy no está prohibido en ninguna de las radios. De hecho, habla de independiente con Matías Martin al aire y en pleno despelote habló con Roman Lejtman. Nunca le prohibimos nada a nadie. Llamaron los del CIE para putearme y les dije: "Yo no le niego un entrevistado a Lejtman. Echenme o llamenlo ustedes a Román y me voy igual". El pluralismo lo mantenemos como sea.
-El COMFER los tiene alquilados, ¿no?
-Bueno... también nos la buscamos. Si tenés a Peña o a Vernaci, que juegan con los límites, estás en la cuerda floja. El COMFER nos puede tener alquilados pero nosotros compramos todos los números de la rifa.
-¿Afecta en lo económico?
-Mucho.
-¿No los retás?
-Por supuesto. Y por contrato ellos se hacen cargo de las multas. Pero si les quieren cobrar 50.000 pesos por decir "culo" no lo pueden pagar ni laburando gratis dos años, y con Peña hay una multa todas las semanas. Se patean para adelante y después se negocia por un descuento y publicidad oficial. Menem te apretaba con multas inpagables porque quería la publicidad. Con Gustavo López y De la Rua te multaban tres lucas y te las cobraban. Así sí se las puedo descontar a los conductores.
-¿Qué pasa que no salen referentes de 20 años?
-No hay. Los últimos son Andy o Matías que pasan los 30. Nuestro karma es no saber qué pasará cuando se retiren Mario o Lalo, que tiene 50 pirulos y cada vez está más cómodo en AM. Ellos en el futuro serán los Larrea o los Carrizo. Pero si pongo gente nueva al lado de Mir o Vernaci los mato, porque no tienen "chapa".
-¿Quiénes te faltan en la radio?
-Gonzalo Bonadeo y Nelson Castro.
-¿González Oro, Néstor Ibarra?
-No me gustan.
-¿Qué pasó con Dolina?
-Continental "durmió. Le ofrecimos más plata y se vino pero no nos sirvió porque ellos pusieron repeticiones y tienen más potencia. Rescindimos el contrato porque nos quedamos sin guita, aunque tenía un año más de contrato.
Gustavo Masutti Llach
Diario Crónica Revista Ahora
Buenos Aires
Setiembre de 2002
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