FICHA
“Radio Taxi 104”
FM Continental (104.3)
Martes de 21 a 23
Conducción: Lorena Toso y Gustavo Tubio
Producción integral: Códigos Producciones
Equipo de producción: Emiliano Bormioli, Lucas Russo, Horacio Insúa y Juan Maestripieri
Colaboración especial: Federico González Beniuc y Jimena Arnolfi
Arrancó en la gráfica y pasó por varios programas de cable hasta que se estabilizó en TN en 1993. Más tarde se incorporó a “Telenoche”. Fue productor de Santo Biasatti (gestionó la nota con el subcomandante Marcos) y de Mónica Cahen D’Anvers y César Mascetti, y empezó a hacer cámara. Ahora Gustavo Tubio va por su cuenta pendiente, la radio, con un proyecto original: “Su estructura gira alrededor del taxi, desde el nombre. Buscábamos una veta distinta, por eso cada semana subimos a una celebridad al taxi y lo llevamos a dar vueltas por la ciudad, recorriendo lugares importantes de su vida. El clima que se da es único”.
-Es una idea televisiva. Hay que creer que están en un taxi.
-Sí. Vale el compromiso del entrevistado. Que suele empezar duro y después se suelta. Los ves que se esfuerzan para contar lo que está pasando, dicen: “¡Pare, taxista!” o “En esta esquina me pasó tal cosa”. Con Ricardo Caruso Lombardi, por ejemplo, chocamos y todo eso enriquece la entrevista.
-¿Por qué un taxi y no un auto? ¿Tienen auspicios por ese lado?
-De eso se encarga la producción comercial, pero sí, hay un anunciante. Sin embargo a mí la idea me gusta mucho por lo que simboliza el taxi en una ciudad.
-¿Se te mete el tachero en la conversación?
-Sí, nos pasó, y a veces buscamos provocar sus intervenciones. Es divertido. Hay una sección, “De qué se habló en el taxi”, en la que se recrean los temas que se hablaron con los choferes. También shows de bandas en vivo.
-Hay un estereotipo del taxista, ¿lo ponés en juego?
-Sí, me encanta esa imagen del tachero fabulador, que se las sabe todas y te da consejos. Que la tiene clara en todo y se levanta a todas las minas. Te dicen: “Acá sube cada uno... Desde el Presidente hasta el último trabajador”.
-También dice ese mismo estereotipo que hay muchos que son reaccionarios.
-Bueno… Cuando la cosa va por ese lado me cuesta. Uno respeta el dolor de quien sufrió un hecho de violencia. Pero cuando se salta la valla para pasar al “Hay que matarlos a todos” prefiero correrme. Porque me pone mal. Se marcha todo el tiempo pidiendo seguridad, pero no hay manifestaciones para pedir que se ataquen las causas de la delincuencia: falta de educación, contención, inclusión, en fin…
-¿Se nota la diferencia de repercusión con la tele?
-Depende de la personalidad de cada conductor. Trato de ser como soy; no tengo el estilo de Sergio Lapegüe, por ejemplo. De hecho, me cuesta cuando me reconocen por la calle si estoy con mi mujer y mis hijos, por más que lo agradezco.
Gustavo Masutti Llach
Fotos: Daniela Java
Revista Ahora - Diario Crónica
Buenos Aires - Argentina
9 de agosto de 2009
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