Adios. El tipo tenía la particularidad de que nada de lo que decía pasaba inadvertido. Buscaba provocar todo el tiempo. Entrevistarlo era caminar por el borde. Decía que no tenía off the record y era cierto. Era capaz de decir las barbaridades más escandalosas cuando se prendía el grabador. Conocía perfectamente los tiempos de la gráfica y desafiaba con sus dichos. Sabía que más de la mitad de las confesiones que hacía eran imposibles de publicar, a riesgo de que todos –empezando por él- tuviéramos problemas legales por hacerlo. De hecho en televisión no decía esas barbaridades. Ya pasó un poco la “euforia” del dolor de su muerte por eso firmo este post. No éramos amigos pero puedo decir con orgullo que me conocía y respetaba, tal vez porque fui uno de los primeros en pedirle una nota (me la negó), cuando su talento asomaba en el programa de Lalo, y antes de su explosión mediática con un escandalete en un horrible programa de TV con el Negro Oro y Marcela Tinayre. Después de aquella gaffe, me invitó por primera vez a su casa e hicimos la nota:
viernes 14 de julio de 2000
Fernando Peña: "Lo masivo es siempre más demagogo, condescendiente y redituable."
. Me dijo que tenía fotos y cuando terminamos me quiso dar una de cuando tenía diez años. Y en serio, no me estaba cargando. Lo acompañé a cambiar un disco a Musimundo y lo vi pelearse con los empleados. Él sistemáticamente compraba discos, los grababa y los cambiaba por otros. Sin ocultarlo. Les decía a los empleados: “esa es su política, si no les gusta más, cámbienla. Si no, no me jodan”.
La segunda vez que estuve en su casa también fue divertido, se había quedado dormido, lo despertó la chica que lo ayudaba con la limpieza y salió en slip y una remera de dormir a la calle a pedir perdón (esa nota no está posteada). Al rato estaba todo bien. Esa vez lo despedí confesándole: “Si fuera puto estaría perdidamente enamorado de vos”. Las otras notas se las hice por teléfono, como ésta, la última:
Fernando Peña: “Nos falta más pasión y espíritu animal”
No son muchos los tipos que saben hacerse querer y odiar con la misma intensidad. El era uno de ellos y se lo extraña. Mucho.
Fernando Peña fue un gran actor, un eximio creador. Compositor de personajes impresionantes. Monseñor Lago, Reboira Lynch, Sabino, Jonatan Bermudez, La Mega, Dick Alfredo, Palito, Roberto María Flores, Elisa Rufino y muchos más que no me vienen a la memoria. Mis preferidos fueron Milagritos López y Rafael Orestes Porelorti y el que menos me gustaba era Fernando Peña, menos aún desde su pelea mediática con D´elia.
ResponderEliminarSaludos.
Sin ningún lugar a dudas se lo va a extrañar.
ResponderEliminarse lo sigue extrañando igual despues de tantos años...
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