FICHA:
“En contacto”
Radio del Pueblo 830
Miércoles de 15 a 16.
Conducción: Lita de Lazzari y Leandro Gasco
“Hace mucho que estoy en la radio. En Del Pueblo desde febrero. Largamos un tema y la gente opina. Comentarios muy lindos. No nos peleamos con nadie, aunque a veces me enojo. Todo el mundo está contento y no damos abasto de la cantidad de mensajes que llegan. Una hora no me alcanza porque la gente necesita que la escuchen”.
“Caminen, chicas”, el slogan - consejo remite a ella sin escalas. La edad otorga como beneficio una suerte de impunidad para opinar y Lita de Lazzari la ejerce sin dramas cada vez que puede. Sobre todo porque así le fue bien, nadie puede discutir que ella contribuyó a que las amas de casa y sus derechos formaran parte de la discusión después de décadas de olvido. Ahora habla desde otro lugar porque ya no va a la Liga de Amas de Casa. “Dejé mi lugar porque estuve mal de salud. Me agarró un síncope. Sin embargo, viajo mucho porque me invitan para saber qué hacen las amas de casa en el mundo. Y presido UNICA (Unión Internacional de Consumidores y Amas de casa). Le pusimos ese nombre para incluir a los hombres”.
Como sus opiniones son más que conocidas, el desafío era hacerla hablar de radio y ella levanta el guante: “Desde muy chiquita me relacioné con su magia –recuerda-. A los doce años escuchábamos una audición que se llamaba ‘Facenzo el maldito´, protagonizada por un personaje muy malvado. La gente se posesionaba tanto que cuando vino a Mataderos, al cine – teatro Alberdi para una obra lo tuvo que sacar la policía porque las viejas lo querían matar (se ríe). Así de en serio se lo tomaban, esa era la trascendencia”.
-¿Su familia se reunía para escuchar programas?
-Sí, claro. Teníamos una radio capilla. Me acuerdo que cuando se murió (Carlos) Gardel, en 1935 nos enteramos por ese medio. La gente lloraba por la calle, fue terrible. Soy de esa época, mañana cumplo 85 jóvenes y dinámicos años. Todavía pienso hacer mucho lío más.
-Vivió la evolución de aquello al walkman.
-Sí, me gustaba más cuando la gente se reunía. Porque ahora escuchar la radio es un acto individual. Cada uno por su lado sin posibilidad de comentar nada. La tele no genera eso, es otro fenómeno distinto. No une a la familia.
-¿A quiénes escucha?
-Radio 10, al muchacho de la mañana (Oscar González Oro). (Eduardo) Feinmann me gusta mucho. Somos iguales. También a Baby Etchecopar. Y a Héctor Ivas, que me hizo una entrevista para Rivadavia un domingo a la una de la mañana y las chicas lo escucharon.
-¿Qué hacían levantadas a esa hora?
-Buscarían precios, qué se yo (se ríe). Las mandé a caminar y volvieron a las cinco de la mañana.
Gustavo Masutti Llach
Fotos: Marisa Marquez
Revista Ahora - Diario Crónica
Buenos Aires - Argentina
25 de julio de 2010