Homero Pettinato: “Si le llego a ganar, mi viejo se muere de orgullo”.

FICHA
“Resacados”
Los 40 principales, FM 105.5
Lunes a viernes de 7 a 10.
Conducción: Homero Pettinato

“La idea es la del ‘antiprograma’. Estamos cansados de las 24 horas en continuado de gente opinando sobre política o la crisis ambiental. Eso no cambia nada. Son todos opinólogos que hablan con soberbia”.


En la mayoría de los programas de radio de la mañana, los diarios y las revistas dominan la mesa de trabajo y las pantallas de las PC y TV están clavadas en portales y canales de noticias. En “Resacados”, conducido por Homero, uno de los hijos de Roberto Pettinato, los comentarios del Facebook marcan la agenda y esa es la línea editorial.
-¿Ustedes proponen una “frivolidad militante”?
-Puede ser. Nosotros también opinamos de todo, pero no nos jactamos de nada. Nunca me vas a escuchar decir (engola): “Yo soy Baby Etchecopar”. Y que me conteste lo que quiera, si le importa lo que dice un chico de 21 es porque no tiene mucho que hacer con su carrera.
-¿La edad te da impunidad?
-No sé. Lo que sí te puedo decir es que la gente de mi generación no está en ningún lado. ¿Dónde mordemos la manzana? Los “nuevos” tienen más de 40 años. Los más chicos son Darío Lopilato, que tiene 29 y Guido Kaczka, de 32.-¿Vos quién sos?
-Un pibe de 21 como cualquier otro. Salgo del estudio y me voy a tomar una birra en la esquina. Si el taxi es caro, me tomo un bondi. Vengo y te lo cuento. Sé lo que pasa en la calle. Y me quiero correr de lo que se supone que consumen los chicos de mi edad.
-¿Qué es?
-Que cuando nos hablan de política, escuchamos ‘choreo’. ¿Cómo lo banco a Maradona si sólo vi meter un gol en tapes? No puedo ser maradoniano cuando me pone a Jonás Gutiérrez de 4 en la selección.
-Pero votás.
-Por eso es grave. Hoy el que pone el cartel más grande se lleva los votos y mi generación la ve pasar. Acá en el programa procesamos todo eso y nos reímos, tratando de transmitir una línea de pensamiento que va a pisar fuerte dentro de cinco años, cuando crezcamos.
-¿Mientras tanto?
-¡A divertirnos!. Para enterarse de lo que pasa hay un montón de radios a esa hora que sólo hablan de noticias.
-Decís que sos un pibe como cualquier otro, pero portás apellido.
-Ja, ja. Seguro que si fuera el hijo de un ferretero no me darían micrófono, eso está claro.
-Para ser justos, también se te exige…
-Sí, tener el humor de Pettinato. Me pasó en TyC, todos esperaban un pendejo brillante que los hiciera reír a todos ni bien se plantaba frente a al cámara. Y estaba arrugado sin saber qué decir. Recién ahora tengo algo para dar. Aquello era casi nulo. Ahora le meto pila, escribo los guiones y me juego.
-Encima compiten.
-Sí, de 7 a 9. Me gana, está todo bien. Acá no hay competencia posible. El tiene una carrera y yo recién empiezo. Y si alguna vez le gano, se muere de orgullo.



Gustavo Masutti Llach

Revista Ahora - Diario Crónica

Buenos Aires - Argentina

18 de abril de 2010

Fotos: Gentileza Marcelo Rebossio.