Páginas

viernes, 1 de octubre de 2004

Eduardo de la Puente: "Habrá que hacerse cargo de que nos vamos convirtiendo en clásicos".



Desde hace años, "¿Cuál es?" (FM Rock & Pop, 95.9, lunes a viernes de 9 a 13) es el programa más escuchado de la Frecuencia Modulada nacional. Esto, sin dudas, de la mano del carisma de su primera figura, Mario Pergolini, pero no menos importante es el aporte de sus compañeros Marcelo Gantman y del multifacético Eduardo de la Puente, quien comenzó como productor y guionista de los primeros trabajos de Mario, y ahora comparte el aire de la radio, y de la televisión con "Caiga Quien Caiga". En la presentación de su libro, "El día más feliz de mi vida", reflexiona sobre sus permanentes cambios de rol: "Soy parte de todo. Puedo publicar libros, tocar con mi banda de rock, salir en la tele o en la radio. En la medida en que puedo desarrollarlo, trato de no quedarme con las ganas de nada. No me importa ser reconocido por el mundillo literario, o la crítica. No me aporta nada, me chupa un huevo, porque tengo mi público que me quiere".
-Pudiste dedicarte a esto a partir de que dejaste de lado los guiones de radio.
-No los dejé de lado del todo, pero la entrada de "los Municipales" (N.de la R.: un grupo de guionistas y actores que colaboran en el programa y se ganaron ese nombre porque "sólo hacen lo que se les pide") me descomprimió. Escribir era una tortura y me empezaba a repetir, estaba totalmente quemado. Por fin, Mario me libera del tema cuando mi mujer, Ana, quedó embarazada hace seis años.
-Pero ahora volviste a escribir para "¿Cuál es?".
-Sí, el personaje es un boticario español, Iñaqui Menenda (una parodia de Xumari Alfaro) y me divierte mucho. Sale una vez por semana porque sufro de "elefantiasis" con la escritura. No puedo hacer guiones cortos. Entonces me demanda bastante laburo.
-¿Escuchás radio?
-Un poco de AM por la mañana mientras voy para el estudio (vive en Ezeiza), y a la tarde a Juan (Di Natale) o a Matías Martin. Si salgo a correr o algo por el estilo, prefiero la AM.
-Pero no estás ajeno al medio. ¿Te parece que hay humor guionado de calidad en el dial?
-No, no como el nuestro, que tenemos varios segmentos desde hace años. En el resto del dial hay poco y no tan bueno. El guión quedó en el recuerdo.
-¿Por dónde pasa el humor en la radio, entonces?
-Por el desfile de personajes y las imitaciones, se basan más en la impronta. Hay mucha sanata entre los humoristas radiales. Debemos ser de los pocos que mantenemos la escritura, eso se terminó hace unos años, por caro o trabajoso.
-¿El guión te resguarda del ridículo, una frontera tan fácil de cruzar en el humor?
-Y... no sé. A veces un mal guión te puede enterrar en el ridículo. Por eso tienen que estar bien escritos, con una sólida estructura del gag y el sketch. Y ser graciosos, claro. Aunque después lo que cause más risa sea la improvisación.
-Como la apertura del programa.
-Exacto, ahí vamos sin red.

Eduardo formó parte, junto a Bobby Flores, Mario Pergolini, Ari Paluch, Lalo Mir y la "Negra" Vernaci, de un grupo de jóvenes que, desde la FM llegaron para "patear el tablero" de la comunicación radial de la por entonces flamante democracia. Un puesto que supieron ganarse y que se resisten a dejar.
-Hace poco Bobby Flores me decía que no hay rebeldía frente al micrófono de los jóvenes. ¿Es así?
-Nunca lo pensé. Es cierto que nos llegan un montón de demos por semana y ninguno nos provoca nada. Lo último fueron los Municipales, que eran apenas una punta, y los hicimos crecer en el aire. Ellos son el último recambio generacional en el medio, y ya llevan seis años. Pero van llegar los nuevos, así como nosotros hicimos el reemplazo en su momento. Es inevitable.
-Pero ustedes pudieron "inventar" un medio, la FM, en Buenos Aires.
-Sí, eso ya no corre. Sin embargo, creo que nosotros nos mantenemos porque seguimos pateando culos. Cuando nos estanquemos, el recambio nos va a pasar por arriba. No hay fórmulas mágicas.
-¿La edad la cargan? No están muy lejos de la que tenía Héctor Larrea cuando ustedes empezaron.
-También es verdad, ojalá lleguemos a su edad como él. Habrá que hacerse cargo de que nos vamos convirtiendo en clásicos.
-¿Esto los condiciona?
-Cero. Creo que hace más de cinco años que no tenemos una reunión de producción por el programa de radio. Nada, nunca. La gente puede fantasear con que llegamos a la Rock & Pop un par de horas antes, no es así. Entramos cinco minutos antes de salir al aire y no tenemos ni idea de qué tema vamos a disparar con Mario.
-Decime dos palabras de Mario Pergolini como conductor de radio.
-El mueve la pelota y nosotros jugamos. El sí va a ser recordado en el futuro como el Larrea o el Cacho Fontana de esta época. El tipo dejó una radio nueva, no sólo desde el lenguaje, sino desde el aprovechamiento de recursos tecnológicos.
-¿Por ejemplo?
-En el uso de samplers que disparan sonidos inmediatamente, y que se desparramó como una metástasis en las otras radios. Pero no debe haber otro programa en el mundo que a la hora tiene editado un resumen de lo que pasó en ese tiempo.
-¿Cómo surgió eso?
-Porque tenemos un pibe que edita a los pedos y muy bien, entonces lo pusimos para que lo haga "on line", al servicio de "¿Cuál es?". Listo. Y me sorprende, porque vos podés decir que "hay que inventar un destornillador al revés", y a la media hora está sonando una publicidad de eso. Es así, tenés que estar siempre un paso adelante, porque si no, te aplastan los que vienen atrás.

Gustavo Masutti Lach
Revista Ahora- Diario Cronica
Buenos Aires - Argentina
Octubre de 2004

No hay comentarios:

Publicar un comentario